NEPAL, EL INICIO...
¿Que impulsa a una persona a dar un giro radical a su vida y lanzarse a dar una vuelta por el mundo?
Esta pregunta me la han hecho varias veces y sobre todo el día que anuncie que me iba a dar la vuelta al mundo.
Supongo que cada persona tiene sus razones. Las mías....
Desde hace muchos años cada vez que me embarcaba en una aventura, por pequeña que esta fuera, disfrutaba de cada cosa que me pasaba. Así empezaron las acampadas, pequeños viajes etc. Un día junto con mis amigos Aitor y Fer decidimos irnos a vivir un temporada a Irlanda. Aquí pase un año trabajando y disfrutando de una nueva experiencia.
Hasta entonces, ingenuo de mi, pensaba que Vitoria era el centro del mundo pero aquí descubrí que estaba muy equivocado, que el mundo era muy grande y mas grande aun poder conocer gente de todos los lugares.
Para mi poder comunicarme con gente de todo el mundo, conocer su forma de pensar fue despertando en mi una creciente curiosidad no solo de oír hablar de esos lugares si no de querer conocerlos en persona.
A partir de entonces se han sucedido interrailes, viajes en furgoneta, viajes con la mochila etc.
He pisado mas de 50 países, y digo pisado porque en algunos de ellos solo he estado unos dias. Siempre que he viajado he tenido la sensación de que mis vacaciones eran demasiado limitadas, lo que no me permitía hacer muchas cosas que se me iban presentando. ¿Nunca OS habéis dicho iría a ese lugar pero no puedo porque tengo el tiempo limitado de mis vacaciones?
Pues yo me lo he dicho muchas veces, las mismas que me he dicho que algún día viajare sin tiempo, sin fechas, haciendo lo que me apetezca en cada momento, todo aquello que se me presente y que antes no me permitía hacer.
Voy a viajar con un billete de ida, quiero aprovechar cada oportunidad que se me presente, quiero ver las montañas más altas, bucear en los mejores fondos, surfear las mejores olas, ve amaneceres, y atardeceres donde antes solo soñaba cuando me asomaba en mi terraza...
Y sobre todo quiero aprender de toda la gente que me vaya encontrando, independientemente de su origen o religión.
Siempre he dicho que una de las cosas mas grandes que me han aportado mis viajes, es que me ayudan a poner los pies en el suelo, a darme más cuenta de que somos unos auténticos privilegiados, que no es el dinero lo que da la felicidad si no la actitud ante la vida. Esto me lo han enseñado gente con muy pocos recursos económicos pero con muchísimas ganas de vivir, con un brillo en los ojos y una alegría en el cuerpo que muchos en "nuestro mundo" quisieran.
Por todo esto es por lo que voy a intentar vivir esta experiencia y que muy humildemente intentaré plasmar en este modestito espacio.
Mi nueva vida comienza en Nepal, el techo del mundo